domingo, 9 de octubre de 2011

OBJETIVOS.

Generalmente cuanto más fuerte es el deseo por  conseguir un objetivo, más crece la obsesión y más difícil es alcanzar lo anhelado. Y creo que es lo que nos está pasando. Porque no es normal que el equipo entrene muy bien, y a la hora de jugar los partidos no tengamos la tranquilidad necesaria para desarrollar lo entrenado. Independientemente de quien sea el contrario, no por el resultado sino por como jugamos.
También tengo que tener en cuenta la frescura física o mental. Se puede entender lo primero por
 las cargas físicas normales de la pretemporada que condicionan mucho a la hora de la acción reacción. Y lo segundo por los resultados, que son consecuencia de la física, a veces quieres pero no puedes. Y ello quita confianza y seguridad, y eso también tiene su resultado en la cancha. No a todos los equipos les hace el mismo efecto la pretemporada, a algunos les cuesta más que a otros empezar bien físicamente.
Creo que, como todo, es momentáneo. Pero debemos tener la tranquilidad y la capacidad para adaptarnos lo más rápidamente posible, (SIN PRISAS, PERO SIN PAUSA). El trabajo y la confianza en él, es lo que al final nos dará el resultado que todos esperamos.
Recuerdo siempre los momentos de desesperación de una temporada cualquiera, donde no empezamos bien y todo nos creaba dudas… Que si las comidas, que si la táctica, que si la preparación física, que si los fichajes, que si somos egoístas, nada,  lo mismo de siempre en cualquier equipo. La diferencia es la capacidad de tranquilidad que podamos tener, la capacidad de reacción que debemos demostrar y, sobre todo, la capacidad de unión que debe siempre de sobresalir, tanto de los jugadores, técnicos, directivos como con los aficionados. Todo ello nos solo nos dará fuerzas para conseguir el objetivo sino nos enseñará el camino más seguro y más rápido.

Independientemente de los factores expuestos, analizar cualquier acción táctica grupal como individual nos ayudará a resolver toda clase de circunstancias. Pero siempre con la intención de resolverla, no de buscar culpables.

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